No se trata de que sea el mas inteligente del barrio, sino de estimularle para sacar el máximo partido de sus potenciales virtudes naturales, y enseñarle mediante una serie de ejercicios prácticos, todo lo que facilite la convivencia y agilice la comunicación con el tutor.
Hay que tener en cuenta que el concepto de “inteligencia” en los perros no es igual que en los hombres; los animales tienen una capacidad mental ciertamente limitada y muchas veces lo que aprenden son modelos de respuestas que luego van repitiendo sucesivamente.
De la suma de las tres se obtiene su capacidad total del perro.
La buena combinación entre el deseo del perro por aprender y la capacidad del amo para enseñarle, controlando su distracción, hará que cualquier cachorro pueda obtener excelentes resultados.
Después del nacimiento, el contacto físico, tanto con la madre que los lame creando lazos emocionales y de seguridad, como con sus hermanos de camada, es fundamental para despertar los sentidos y establecer relaciones con el mundo que los rodea.
Debemos crear ese contacto físico de tal forma que el calor de los amos sustituya al de la madre. Es importante que los niños de la familia participen en esta tarea.
Primera regla: El entrenamiento debe empezar a partir de los cuatro meses o incluso antes. Es mucho mas sencillo corregir a un cachorro que a un adulto con mañas.
Segunda regla: Es espacio destinado a la enseñanza debe ser tranquilo, un lugar donde el perro no encuentre demasiados elementos de distracción. Luego podrá pasar a lugares mas concurridos o abiertos.
Tercera regla: Resulta imprescindible establecer una cercanía física con el animal durante las enseñanzas. El profesor se colocará próximo al cachorro para corregirle o felicitarle sugún convenga.
Cuarta regla: Las lecciones de aprendizaje serán cortas, Es mejor hacer varias secciones con descansos entre ellas, que una excesivamente larga que fatigue al perro y al adiestrador.
Quinta regla: Hay que ser constante en la enseñanza y coherentes como maestros, pronunciando las mismas palabras y signos en cada sesion de entrenamiento.
Sexta regla: Es fundamental ser paciente sobre todo si el perro es lento aprendiendo. También sera necesario cierta s dosis de flexibilidad, y por último muchísima firmeza en la enseñanza
Séptima regla: Es muy importante elogiarle y recompensarle cuando el perro obedece; única manera que comprenda q que su conducta le gusta al amo.
Fuente: Revista Virtual Veterinaria
Veterinaria Tacuarí
Foto de Cristina Anne Costello en Unsplash
Uno de los implementos, casi obligados, del entorno del perro como animal doméstico, es el…
La falta de aprendizaje es la causa más frecuente de eliminación inadecuada en el perro.…
El Uso de la Correa El uso de una correa que permita sujetar al perro,…
Muchos perros todavía disfrutan de una vida al aire libre, que les permite gozar de…
El perro y el automóvil Según las últimas estadísticas, más de 70 por 100 de…
Características de la cama del perro El rincón de reposo de los animales domésticos de…