Introducción
La estenosis lumbosacra es la artritis de la articulación entre la última vértebra lumbar y el sacro, que es uno de los huesos que forma la pelvis.
Esta artritis estrecha el canal por donde transcurren la médula espinal y las vías nerviosas.
El disco intervertebral entre la vértebra y el sacro también suele ser anormal, lo que estrecha aún más el canal.
La artritis y la enfermedad del disco ejercen presión sobre los nervios que salen de la médula espinal.
Sinonimia
Inestabilidad lumbosacra, malformación lumbosacra, mala articulación lumbosacra, estenosis espinal lumbar, espondilolistesis lumbosacra, compresión de la raíz nerviosa lumbosacra y síndrome de cola de caballo.
Sintomatología
El signo más común es el dolor. El dolor puede ocurrir en la espalda, en una o ambas extremidades posteriores o en la cola. El perro suele tener dificultades para levantarse después de estar acostado, pero una vez que comienza a caminar, la rigidez desaparece.
Puede existir pérdida de masa muscular en una o amb0s miembros traseros. El animal puede tener dificultad para la micción o defecar debido al dolor, puede sufrir incontinencia o no poder orinar.
Algunos no pueden mover la cola o sienten un dolor intenso si la mueven. A menudo, caminan arrastrando los pies y se raspan los dedos.
Otros se muerden la zona pélvica, las extremidades traseras o la cola, lo que a veces provoca un daño considerable por esta automutilación.
Muchos de los signos observados en la estenosis lumbosacra pueden parecerse a los de la displasia coxofemoral y es necesario diferenciar las dos patologías.
Animales que tienen predisposición a esta enfermedad
La estenosis lumbosacra ocurre con mayor frecuencia en perros de razas grandes. Los Ovejeros alemanes parecen tener más probabilidades de desarrollar esta afección.
El trastorno puede ser adquirido, lo que significa que el perro al inicio se desarrolló con normalidad y luego presenta esta dolencia. O bien, la estenosis lumbosacra puede ser una afección congénita , lo que significa que el perro nació con la anomalía. De cualquier manera, los síntomas generalmente no aparecen hasta que el perro tiene entre 3 y 7 años de edad.
La estenosis lumbosacra rara vez se observa en gatos.
Diagnóstico
El Médico Veterinario le realizará al propietario una serie de preguntas (anamnesis) de cuándo se desarrollaron los síntomas, etc.
Luego se realizará un examen físico. Las extremidades posteriores se manipularán de diversas formas para determinar qué posiciones son dolorosas.
El profesional también llevará a cabo un examen neurológico, que incluirá pruebas de los reflejos, para determinar qué nervios pueden estar afectados.
Se toman radiografías (rayos X) para evaluar la columna vertebral y la pelvis. Los hallazgos pueden ser muy sugestivos de estenosis lumbosacra, pero no son suficientes para hacer el diagnóstico.
Para lograr un diagnóstico definitivo, se deben realizar procedimientos especiales inyectando material de contraste en el área afectada y volviendo a realizar la placa radiográfica.
Dependiendo de dónde se coloque la sustancia de contraste, el procedimiento se llama mielografía, epidurografía o discografía. Estos procedimientos deben realizarse bajo anestesia.
La aparición de esta sustancia marcadora por las anomalías en los huesos y el disco intervertebral confirma el diagnóstico de estenosis lumbosacra.
Tratamiento
Dependiendo de la gravedad de la afección, la cantidad de dolor que experimenta, la salud general, las restricciones financieras y otros factores, la estenosis lumbosacra se trata quirúrgicamente o no quirúrgicamente.
Tratamiento no quirúrgico
Si la afección es leve, los perros pueden recibir tratamiento con reposo estricto durante 6 a 8 semanas. Se administran medicamentos antiinflamatorios como la prednisolona. En muchos casos, esto puede aliviar los síntomas. Sin embargo, cuando el perro se vuelve más activo, los síntomas pueden reaparecer.- Tratamiento quirúrgico
Existen dos técnicas quirúrgicas diferentes que se utilizan para tratar la estenosis lumbosacra:
1.- En la primera técnica, los huesos se fusionan en una posición lo más normal posible. Esto previene el movimiento anormal entre ellos y reduce el riesgo de sufrir más artritis.
2.– En la segunda técnica, se extrae parte del hueso y del disco intervertebral para reducir la presión sobre la médula espinal y los nervios.
En cualquier caso, los perros deben permanecer confinados durante 2 a 4 semanas después de la cirugía y también pueden recibir terapia con prednisolona.
Para los perros que tienen dificultad o no pueden orinar, se debe vaciar la vejiga manualmente varias veces al día.
Pronóstico
El pronóstico para los perros con estenosis lumbosacra depende de la gravedad de los síntomas antes del tratamiento.
Los perros levemente afectados pueden recuperarse totalmente.
Para quienes tienen incontinencia o no pueden orinar antes del tratamiento, el pronóstico es mucho peor.
