Los gatos y los perros pueden sufrir quemaduras solares. Los gatos con orejas blancas son especialmente susceptibles a sufrir lesiones por radiación solar en las puntas y bordes de las orejas.
Los collies y otras razas de perros como los perros ovejeros de Shetland, que carecen de pigmento nasal, pueden desarrollar una afección llamada “nariz de collie ” o “dermatitis solar nasal“. En realidad, esto se debe a una hipersensibilidad a los rayos solares.
Algunas mascotas, cuyo pelo es muy corto o que por alguna razón tienen una disminución en la densidad de su manto piloso, pueden sufrir quemaduras solares en la zona expuesta de la piel.
Los animales susceptibles a sufrir quemaduras térmicas deben mantenerse alejadas de la acción solar directa en la época estival, especialmente al mediodía, cuando el sol es particularmente fuerte.
Para prevenir las lesiones producidas por la radiación solar, se deben utilizar protectores solares (SPF debe ser de 15 o más), incluidos los desarrollados específicamente para mascotas y los que contienen dióxido de titanio como ingrediente activo.
Para animales con la piel expuesta, se puede colocar una camiseta (de niño o de adulto, según el tamaño ) sobre el cuerpo.
Al igual que los humanos, los animales con la piel quemada por el sol tienen más probabilidades de desarrollar tumores de piel, por lo que la protección contra las quemaduras solares es extremadamente importante.
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