Es un conjunto de enfermedades que poseen un denominador común producen lesiones vesículo-ampollares en la piel, lo constituyen el pénfigo vulgar, pénfigo foliáceo, pénfigo eritematoso, pénfigo vegetante y al penfigoide bulloso.
Los pénfigos caninos y felinos representan aprox. el 0,3% de los procesos cutáneos.
Afectan animales de mediana edad, no se ha encontrado predilección de estos procesos por un sexo determinado pero si de raza: Akita, Chow chow, Teckel, Terranova, Bearded collie, Pastor alemán y Doberman pinscher en el pénfigo foliáceo, y Pastor alemán y Collie en el pénfigo eritematoso. Igualmente se ha descrito una mayor aparición del penfigoide bulloso en Doberman pinscher y Collie
¿Cuál es la causa y cómo se presenta?
Es una enfermedad autoinmune (ver explicación en Lupus).
El complejo pénfigo se caracteriza por la aparición de lesiones vesículo-ampollosas que evolucionan a pústulas, pudiendo también aparecer lesiones erosivas a ulcerativas rodeadas de collaretes epidérmicos al romper las vesículas y/o pústulas.
Estas lesiones aparecen a nivel de la piel si bien pueden interesar también a las membranas mucosas. Las vesículas y pústulas son transitorias luego hay aparición en el proceso de costras amarillentas.
Los distintos procesos de pénfigo manifiestan diferencias respecto a la ubicación de las lesiones
- Pénfigo vulgar
- Pénfigo foliáceo: la distribución de la lesiones normalmente son en la cara y generalmente muy escamosas
- Pénfigo eritematoso: Lesiones en la cara tipo de fotosensibilizacion, y nariz despigmentada considerado como una forma benigna del foliáceo o como un híbrido entre el pénfigo foliáceo y el lupus eritematoso.
- Pénfigo vegetante: lesiones que se asemejan a papilomas (verrugiformes) , es extremadamente raro.
- Pénfigo bulloso: Afecta la boca, la piel y demás uniones mucocutáneas: labios, ollares, párpados, prepucio, vulva, ano.
En cualquiera de estas enfermedades autoinmunes la presencia de prurito y dolor es variable según el caso, pudiendo también existir una sintomatología general en el animal como disminución del apetito o fiebre persistente.
En el caso de las enfermedades vesiculosas el diagnóstico se realiza por biopsia del tejido afectado (requiere la exploración del animal cada pocas horas a fin de encontrar vesículas de reciente aparición)
¿Es grave?
El pronóstico de la enfermedad varía con la forma e intensidad del proceso. Así, el pénfigo vulgar es fatal en el 95% de los casos no tratados, por debilitamiento progresivo e infecciones generalizadas pero con resultados muy buenos (no de cura pero si de mejoría ) en caso de instaurar un tratamiento y que responda al mismo.
El pénfigo foliáceo es menos severo, teniendo un buen pronóstico si se trata, aunque también puede ser fatal sin tratamiento . Los pénfigo eritematoso y vegetante se consideran como formas benignas sin afectación general teniendo mejor pronóstico.
¿Tiene Cura?
No tiene cura pero si tratamiento.
El control de los procesos autoinmunes que afectan a la piel requiere la administración de grandes cantidades de glucocorticoides vía sistémica, con o sin la administración de alguna otra droga inmunodepresora . Además se deberán combatir las complicaciones secundarias de cada caso en particular.
El tratamiento en general se lo combina con antibióticos orales o inyectables y baños de champús queratolíticos .
Autor: Dra. Adelaida (Ade) Goldman
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