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Cuidados Básicos

La casita del perro

La Casita del Perro

Muchos perros todavía disfrutan de una vida al aire libre, que les permite gozar de una existencia en semilibertad en una chacra, o en el jardín de una vivienda familiar.

Estos animales, generalmente de buen tamaño, deben tener un lugar seco, limpio y relativamente abrigado donde descansar y refugiarse de las inclemencias climatológicas.

En un porcentaje bastante elevado, los propietarios de estos perros prefieren que entren en la casa, en el zaguán, la cocina o en cualquier otro aposento, incluso algún cobertizo, cochera o garaje.

En este último caso, deberá habilitarse un camastro elevado en un rincón protegido, ya que, en contra de lo que pudiera parecer, es menos confortable para un perro alojarse o pernoctar en un cobertizo grande que en un pequeño recinto que se templa con el propio calor del animal, la “cucha” como refugio diurno u hogar permanente.

La Casita o “Cucha” del Perro

La “cucha” debe cumplir una serie de requisitos mínimos de emplazamiento y estructura. El volumen útil interior de la construcción debe ser el mínimo para permitir los movimientos mínimos del animal y el confinamiento voluntario en su interior durante, algunas horas, siendo acorde con las dimensiones del huésped.

La Ubicación

El suelo estará elevado del nivel del terreno un mínimo de 10 cm y construido sobre una pequeña base de cemento que asegure un perfecto aislamiento de las posibles humedades.

El Piso

De ser posible, el piso de la construcción presentará un ligero declive, canalizado, con la parte más baja situada en la única puerta de acceso.

De esta forma, se asegura una cómoda limpieza e higiene interior que permite evacuar el agua de lavado, sin retener las suciedades ni la humedad en la perrera.

Los Laterales

Los muros laterales o paredes, de la casilla serán de ladrillo o madera doble con una capa aislante intermedia y enduídas interiormente de forma tal, que sean completamente lisas, sin recovecos, y pintadas con pintura sintética de color blanco.

El Techo

El techo, a dos aguas si esta vivienda canina está aislada, o con una sola vertiente si se construye adosada a un edificio, debe ser desmontable, sobre unas guías de acero inoxidable o perfiles de aluminio anodizado, para deslizar el techo cada vez que se realice una limpieza higiénica de la casilla.

Sin embargo, esta convertibilidad no supone un deficiente aislamiento de la techumbre, que permita la circulación de corrientes de aire o la eventual permeabilidad al agua de la lluvia o de licuación de la nieve.

La Orientación

La orientación de la puerta se fijará preferentemente al Norte, siempre protegida de los vientos o fríos más violentos. Puede colocarse una tela de bolsa arpillera u otro género, a modo de cortina que asegure durante el invierno la conservación de una temperatura óptima para el animalito.

Actualmente se utilizan “cuchas” estacionales, prefabricadas, construidas en materiales ligeros o veraniegas que no requieren, lógicamente, los mismos requisitos de estanqueidad y aislamiento que las tradicionales, permitiendo el alojamiento canino en un ambiente natural durante las etapas más benignas.

Bibliografía

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