Los gatos que "atacan" el rollo de papel de la cocina o del baño es una molestia y puede ser peligroso para ellos ya que también pueden saltar sobre las hornallas calientes recién apagadas. Se han usado varios métodos para prevenir o cambiar esta conducta.
Si se observa al gato en el momento de saltar hacia el rollo de papel, se le puede tirar una lata llena de monedas u otro elemento que haga mucho ruido, por supuesto sin pegarle a él, la idea es que el ruido lo sobresalte y lo relacione con el ataque al rollo, eso lo asustará y lo persuadirá de no hacerlo nuevamente, claro pero no se permanece todo el día de la cocina para sorprenderlo en el momento del "ataque", entonces se deberá usar la imaginmación con otros sistemas de educación.
Otro método es poniendo sobre el rollo de papel pequeñas latas con agua (pueden ser las de picadillo de carne), cuando el gato mueva el rollo le caerán encima mojándolo que para ellos es una experiencia desagradable, pero en este método hay que usar la astucia porque el gato es muy hábil para salir airoso de una situación desagradable y si no lo moja, el no aprenderá y estaremos limpiando el piso o la mesada de gusto.
Los globos pueden ser un exclente disuasivo. Hay que inflar globos, acercarlo al gato, que lo olfatee y explotar el globo, también animarlo que el lo pinche con sus uñas y reviente, por supuesto que les desagrada el ruido, luego que se hizo varias veces esta actividad, podemos "decorar" el rollo con globos, es muy probable que no se acerque a los globos y de paso alegra la cocina!!.
¿Finalmente, porqué el gato salta sobre el rollo de papel?
Hay que observar que es lo que lo excita, puede ser que lo relacione con bolas de papel que jugaba cuando era pequeño, la comida puede estar cerca, sus juguetes preferidos también, además de los métodos anteriormente nombrados debemos ofrecerle otros entretenimientos para distraerlos y se olvide del rollo de papel de la cocina o del baño, como cajas de cartón con varias "entradas", juguetes nuevos con plumas o papel, etc, o sea recurrir al ingenio para distraerlo en otra actividad y se olvide de sus "aventuras" en la cocina o en el baño.