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Enfermedades Parásitos

Ascaridiasis

Ascaridiasis en el Perro y en el Gato

Introducción

Es una enfermedad cosmopolita (distribuida por todo el mundo).

Particularmente se manifiesta en los cachorros y en los perros de joven edad, se debe a dos nemátodos (parásitos): Toxocara canis y Toxoascaris leonina, a los cuales puede agregarse el áscaris del gato, Toxocara cati.

Estos viven en la fase adulta en el intestino delgado del perro, y tienen una longitud emprendida entre los 4 y los 18 cm., los primeros, y de 2 a 10 cm, los segundos.

Ciclo biológico del Toxocara canis.

Los machos y hembras presentes en el intestino del perro miden de 5 a 18 cm. Las hembras ponen los huevos, que son eliminados con las heces.

Estos huevos en ambiente externo maduran, transformándose en larvas infestantes.

Éstas, si son ingeridas por el perro y otros cánidos selváticos, se liberan de su envoltura y pasan del intestino, hígado, pulmón, tráquea, esófago, estómago y, por último, al intestino, donde, a través de algunas transformaciones, se llega a la formación de gusanos adultos, sexualmente maduros. Esto se lleva a cabo, normalmente, en perros muy jóvenes.

La migración, denominada somática, está determinada por la ubicación de larvas latentes de áscaris en diversos órganos del perro como músculos, hígado, riñón, cerebro. Esta circunstancia se da con mayor frecuencia en los perros adultos.

Esto es muy importante para explicar cómo en las perras la localización larval somática está en condiciones de infestar, antes del nacimiento, al feto en el útero. Existe, efectivamente, por estímulos hormonales, un pasaje de larvas de la perra al feto.

Infestación del cachorro

Después del nacimiento del cachorro, la larva que se había localizado en el hígado durante la vida fetal evoluciona, pasando al pulmón, tráquea, estómago, para después dar origen al gusano adulto en el intestino del cachorro.

Una tercera posibilidad de contagio está determinada por la ingestión, por parte del cachorro, de larvas con la leche. Esto se debe al hecho de que la perra puede infestarse por vía oral durante la gestación o en la fase del parto.

La ingestión de huevos embrionados puede afectar no sólo al perro y otros cánidos, sino también a los huéspedes no habituales, como ratones, ratas, cobayas, conejos, pollos, cerdos, ovejas, cabras, vacas e, incluso, el hombre.

Los propios animales (incluido el hombre) pueden ingerir carnes o vísceras de huéspedes no habituales, conteniendo larvas dormidas.

Infestación en el hombre

En el caso del hombre los más propensos son los niños de 2 a 5 años que ingieren tierra de areneros que comparten con los perros, generalmente en ciudades muy populosas, donde existe escasez de espacios verdes, donde pueden ingerir huevos larvados.

También cuando son lamidos por perros infestados o tocar a un perro cerca del ano donde puede haber huevos, de todas maneras el huevo de áscaris necesita un tiempo de maduración en el suelo (por eso hay que tener cuidado con la tierra o los areneros).

Las larvas, libradas de los huevos embrionados, realizan una migración entero-hepato-pulmonar somática, con la distribución en diversos órganos y aparatos (hígado, pulmones, musculatura, riñones) llamadas larva migrans visceral y cuando afecta al ojo larva migrans ocular (grave en los niños porque puede producir una patología severa en el globo ocular).

Recomendaciones para evitar el contagio por huevos de áscaris en niños y adultos:

  • Desparasitar a los cachorros a los 15, 30, 45, 60, 75, 90 días del nacimiento y luego repetir cada 4 meses.
  • Desparasitar a la perra en el momento del celo antes del servicio con el macho.
  • Hacer análisis de materia fecal en forma periódica.
  • Pasear al perro con collar y correa, para que no vagabundee.
  • Lavar muy bien los vegetales que son ingeridos crudos.
  • Evitar que los niños se lleven tierra o arena a la boca.
  • Lavarse bien las manos después de tocar el perro.
  • Evitar que los niños sean lamidos en la boca por el perro.
  • Evitar que los perros ingieran roedores, aves o carne cruda de animales salvajes.
  • Medidas rigurosas de higiene y cuidados.
Importante!!
Teniendo en cuenta estas sugerencias y un poco de cuidado la posibilidad de infestación por parte de larvas de áscaris es prácticamente muy baja, y tanto adultos como niños podrán disfrutar de su mascota sin ningún riesgo.

Bibliografía

Foto de jovin kallis en Unsplash