Introducción
El Carlino o Pug es un pequeño perro de compañía muy inteligente que gusta mucho de corretear y jugar con sus tutores, pero que se muestra particularmente desconfiado y reservado con los extraños.
Se adapta bastante bien o espacios no demasiado amplios, resaltando también sus buenas cualidades de guardián de la casa, ya que ladra con decisión ante la proximidad de personas desconocidas, si bien tiene un sueño relativamente profundo y “ruidoso” debido a su modo de roncar que a veces resulta, incluso, desproporcionado.
Origen
El origen de este simpático perro, también definido como un mastín en miniatura, debe buscarse en el Extremo Oriente.
Desciende directamente de los perros Pai, tan apreciados por los emperadores chinos, y su difusión en el continente europeo se debe a los comerciantes holandeses de sedas y especies que, al comienzo del Renacimiento, los llevaron consigo en sus viajes de retorno, conjuntamente con sus preciosas cargas.
Su tamaño, no muy grande, y su aspecto arisco y severo, contribuyeron de manera determinante a su rápida difusión entre las familias nobles de Europa.
Se dice, incluso, que al príncipe holandés, Guillermo el Taciturno, le salvó la vida uno de estos pequeños perros que, dando la alarma durante la noche, previno un inesperado ataque de los españoles.
Características Generales
El Carlino es un perro de tamaño no muy grande, pero de constitución muy robusta, compacto y bien musculosa. La cabeza, bastante característica, es ancha y maciza, con el hocico fuerte, corto y cuadrado, y está surcada por un tupido trazado de pliegues muy profundos. Las extremidades son potentes.
- Altura y peso
Alzada a la cruz no fijada por el estándar. Pesa de 6,3 a 8 kg. - Cabeza
Grande, maciza, redonda, sin surco central sobre el cráneo. Hocico corto, obtuso, cuadrado, no levantado. Muchos y profundos pliegues. - Ojos
Oscuros, muy grandes, prominentes, globulares. - Orejas
Finas, suaves, parecidas al terciopelo negro. Pueden tener forma de rosa o de botón. - Cuerpo
Corto y macizo, con tórax amplio. Costillas bien abarriladas. - Extremidades anteriores
Muy fuertes, rectas, no muy largas, bien aplomadas por debajo del cuerpo.
- Extremidades posteriores
Como las anteriores. - Pies
No son largos como el “pie de liebre”, pero tampoco redondos como el “pie de gato”. Dedos bien separados. Uñas negras.
- Cola
Retorcida, enrollada, articulada muy cerca del anca. - Pelaje
Fino, liso, suave, corto, brillante, ni duro ni lanoso. Color: plateado, amarillo, albaricoque o negro.
Alimentación
Las necesidades alimenticias, calculadas como ración de mantenimiento, están comprendidas, para los ejemplares más pequeños, entre las 530 y 580 Kcal. diarias y para los más pesados, entre las 580 y las 650, como ración de mantenimiento.
Cuidados Diarios
La limpieza de la capa y de la piel, como en general para todos los perros
Con el Médico Veterinario
Aquí hay una visión general de algunas enfermedades comunes en los perros de la raza Carlino o Pug:
- Enfermedad de Legg-Calvé-Perthes: Una condición degenerativa de la articulación de la cadera que a menudo afecta a los carlinos. Puede causar dolor y cojera.
- Luxación de rótula: Los carlinos son propensos a tener rótulas que se salen de su lugar, lo que puede causar cojera e inflamación.
- Respiración dificultosa: Debido a su hocico corto, a menudo tienen problemas respiratorios y pueden sufrir de golpes de calor o sobresfuerzo.
- Diabetes: Tienen un mayor riesgo de desarrollar diabetes, especialmente si están obesos.
- Problemas oculares: Los ojos grandes y saltones de los carlinos los hacen propensos a problemas como la queratitis seca o los entropiones (párpados enrollados hacia adentro).
- Convulsiones: Algunas líneas de carlinos tienen una mayor predisposición a las convulsiones.
Foto de Timolina
Fuente Icono: Freepik