Introducción
Las cataratas son uno de los problemas más comunes que afectan a los ojos del perro.
Existen muchas formas y causas diferentes de esta patología. Afectan a todas las razas y edades, pero ciertos tipos aparecen con mayor frecuencia en determinadas razas.
A pesar de que son muy comunes, todavía hay mucho que desconocemos sobre las cataratas. La única opción de tratamiento actual es la cirugía, pero con un correcto diagnóstico el resultado es muy alentador.
Etiología (causas)
La palabra catarata significa literalmente “romperse”. Esta ruptura se refiere a la alteración de la disposición normal de las fibras del cristalino o de su cápsula.
Esta interrupción resulta en la pérdida de transparencia produciendo un enturbiamiento del cristalino y la consiguiente reducción de la visión.
Las cataratas a menudo parecen tener una apariencia blanca o de hielo triturado en el ojo.
Esclerosis nuclear
Esta afección es confundida por cataratas. Es un cambio normal que se produce en el cristalino de los perros adultos mayores.
La esclerosis nuclear aparece como un ligero envejecimiento del cristalino. Suele presentarse en ambos ojos al mismo tiempo y ocurre en la mayoría de animales mayores de seis años.
La pérdida de transparencia se produce debido a la compresión de las fibras lineales de la lente.
La afección no afecta significativamente la visión del perro y no se recomienda tratamiento.
A pesar de que existen varias formas y causas diferentes de cataratas, todas se desarrollan de manera similar.
El cristalino normal se compone de 66% de agua y 33% de proteínas.
La clave de su transparencia radica en la organización extremadamente ordenada y compacta de estas proteínas cristalinas.
Para que la luz pase sin dispersarse, es fundamental que el contenido de agua y la concentración iónica dentro de las fibras del cristalino se mantengan en un rango muy estrecho.
Si el equilibrio se altera y el agua entra en exceso en las células del cristalino, las proteínas se diluyen o se desorganizan, lo que provoca su inflamación y, finalmente, su opacificación, es decir, una catarata.
Edad
La edad a la que un perro desarrolla cataratas es muy importante para clasificar el tipo de este trastorno ocular.
El tiempo de aparición es particularmente importante para determinar si esta patología son el resultado de un rasgo hereditario en determinadas razas de perros.
Cataratas congénitas
Son cataratas que están presentes al nacimiento. Estas cataratas suelen aparecer en ambos ojos.
Las infecciones o toxinas pueden provocar la formación de estas cataratas mientras los cachorros aún están en el útero.
Sin embargo, las cataratas congénitas primarias, como las que se encuentran en los Schnauzer miniatura, se heredan.Cataratas del desarrollo (inicio temprano)
Son aquellas que se desarrollan a edad temprana. Al igual que con las cataratas congénitas, pueden ser hereditarias o provocadas por fuentes externas como traumatismos, diabetes mellitus, infección o toxicidad.
Las cataratas hereditarias a esta edad son más comunes en varias razas, incluidos los afganos y los caniches.Cataratas seniles (de aparición tardía)
Ocurren en perros mayores de seis años pero con mucha menos frecuencia que en humanos. La esclerosis nuclear, que no se considera un problema médico, a menudo se confunde con cataratas a esta edad.Cataratas hereditarias
Las hereditarias pueden ocurrir de forma independiente o en asociación con otra enfermedad ocular.A continuación se enumeran las razas que parecen desarrollar cataratas hereditarias junto con su edad de aparición.Si en un animal es diagnosticadas, obviamente no se debe utilizar para reproducción debido a la probabilidad de perpetuar la enfermedad en la descendencia.Raza Edad de inicio Afgano 6-12 meses Cocker americano 6+ meses Boston terrier Congénito Perro perdiguero de la bahía de Chesapeake 1 + años Ovejero alemán 8 + semanas Golden retriever 6+ meses Labrador retriever 6+ meses Schnauzer miniatura Congénito o 6+ meses Viejo perro pastor inglés Congénito Husky siberiano 6+ meses Staffordshire Bull Terrier 6+ meses Caniche estándar 1 + años Springer Spaniel Galés Congénito West Highland White Terrier Congénito
Si en un animal es diagnosticadas, obviamente no se debe utilizar para reproducción debido a la probabilidad de perpetuar la enfermedad en la descendencia.
El trastorno metabólico más común que provoca la formación de cataratas en el perro es la diabetes mellitus.
Si los perros diabéticos se le realiza un seguimiento durante un año o más, casi todos desarrollarían cataratas.
En estos caninos. las concentraciones de glucosa en el cristalino aumentan. El exceso de glucosa se convierte en sorbitol, lo que provoca un aumento en el flujo de agua hacia el cristalino.
El aumento hídrico provoca la rotura de las fibras del cristalino y la manifestación de la enfermedad.
Las cataratas en perros diabéticos pueden desarrollarse extremadamente rápidamente si no está controlado.
Generalmente afectan a ambos ojos, la extracción quirúrgica del cristalino se puede realizar con éxito en el perro con patología diabética, si el animal ha sido monitoreado exitosamente durante al menos tres meses.
Traumatismos
Un traumatismo causado por un accidente automovilístico o la penetración de una espina, un perdigón de escopeta u otro objeto pueden dañar el cristalino y desarrollar cataratas. Este tipo de cataratas generalmente solo ocurren en un ojo y pueden tratarse exitosamente con extirpación quirúrgica.
Tratamiento
El tratamiento consiste en la extirpación quirúrgica del cristalino. Actualmente no existe un buen tratamiento no quirúrgico para esta afección.
Con el aumento de estudios de casos y avances médicos, el procedimiento quirúrgico para extraer el cristalino problemático es cada vez más frecuente..
Existen varias técnicas diferentes que se utilizan para eliminar el cristalino afectado, entre ellas; la extirpación de todo el cristalino y la cápsula circundante, la extracción del cristalino sin la cápsula circundante, facoemulsificación del cristalino y aspiración y desecación del cristalino.
Todas estas técnicas pueden ofrecer excelentes resultados. Para un resultado exitoso, el animal afectado debe someterse a un examen exhaustivo para determinar si es un buen candidato quirúrgico.
Los animales diabéticos que no están controlados, agresivos que son difíciles de tratar o aquellos que están inmunosuprimidos no son buenos candidatos para la cirugía.
Fuente ImagenIA: gemini.google.com
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