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Razas de Perros

Weimaraner

Es una raza de muestra alemana muy robusta y de gran resistencia. Se la adiestra con bastante facilidad y encuentra utilización para diversas especies de animales: perdiz, faisán, codorniz e incluso el corzo, debiendo cazar, por tanto, en terrenos muy variados, a los cuales se adapta con relativa facilidad. Existe en tres variedades de capa: de pelo corto y fino, de pelo corto y duro y de pelo largo. Las tres tienen en común un buen olfato y un gran afecto por el amo, a lo que se agrega una cierta desconfianza hacia los extraños.
Este perro desciende seguramente de un Braco alemán más antiguo y, en su aspecto actual, ya era conocido en 1600, aunque se encontrara exclusivamente en las perreras de los duques de Sajonia-Weimar, de los cuales después tomó el nombre. Durante siglos permaneció como propiedad exclusiva de estos duques, y sólo a comienzos del siglo XX empezó a extenderse por toda Alemania, entrando en competencia con el Kurzhaar.

Particularmente vivaz, el Braco de Weimar es un perro de buena constitución, de tamaño bastante grande (el máximo para los machos es de 70 centímetros de alzada a la cruz), muy elegante, con estructura compacta y musculosa. Además de ser un buen perro de muestra, el Weimaraner es también óptimo cobrador y sabe seguir perfectamente el rastro de la presa herida. La cabeza, en buena proporción con el resto del cuerpo, tiene orejas de buena longitud, de nacimiento alto. La capa, en todas las variedades del pelo, es gris en diversas tonalidades, desde el plateado al corzo y al gris ratón, con la cabeza y las orejas de color ligeramente más claro.

Alzada a la cruz. Machos, de 59 a 70 cm.; hembras, de 57 a 65 cm.

Cabeza. Enjuta, ligeramente más ancha en los machos que en las hembras. Trufa color encarnado oscuro, grisácea en la parte superior. Caña nasal rectilínea o ligeramente convexa. Labios superiores moderadamente superpuestos a los inferiores. Leve depresión central en la frente. Stop apenas pronunciado. Protuberancia occipital poco prominente.

Ojos. Color ámbar. Incluso bicolores azul-ámbar.

Orejas. Anchas y relativamente largas, con las puntas redondeadas con nacimiento alto y estrecho, ligeramente giradas hacia adelante cuando el perro está alerta.

Cuello. Musculoso, relativamente redondo, pero no muy corto.

Cuerpo. Pecho fuerte, no muy ancho, pero bastante largo y profundo, caído por lo menos hasta los codos. Costillas largas y arqueadas, pero no abarriladas. Dorso relativamente corto, pero no ensillado.

Extremidades. Musculosas, relativamente largas. Hombros largos, bien angulados.

Pies. Muy compactos, con dedos arqueados.

Cola. Cortada en el primer o segundo día de vida a un tercio por la raíz.

Pelaje. Corto-fino, corto-duro y áspero, largo. Color: gris-plateado, gris-corzo, gris-ratón o colores intermedios entre éstos. Cabeza y orejas ligeramente más claras.

ALIMENTACION. Las necesidades alimenticias para este perro de muestra son, como ración de mantenimiento, variables, según el peso, desde las 1.450 a las 1.700 Kcal. diarias. La ración debe aumentarse hasta el triple de estos valores para los ejemplares sometidos a una intensa actividad física, como la de la caza. Por tanto, en este período, para evitar la ingestión de grandes cantidades de alimentos difícilmente digeribles, es necesario aumentar los lípidos con respecto a los carbohidratos. Las grasas, en efecto, constituyen para el perro una fuente de energía de volumen más reducido.

CUIDADOS DIARIOS. El Weimaraner es un perro provisto de una capa de pelo corto y fino que precisa, para la limpieza, de un guante de crin, que ha de pasarse sobre todo el cuerpo y, seguidamente, un paño de franela suave.

CON EL VETERINARIO. El corte de la cola debe realizarse de modo que se reduzca entre 4 y 4,5 cm. Se ha descrito una lesión progresiva de probable origen hereditario en el Weimaraner, consistente en un trastorno de la médula espinal y que comporta, en los ejemplares de 30 a 40 días, un andar a saltos