Giardias son uno de los protozoos más comunes que pueden parasitar a gatos y perros. Sólo recientemente se ha descubierto el potencial de giardia para causar diarrea en animales y seres humanos.
La infección puede adquiriese por contacto directo con materia fecal que contiene parásitos, así como también agua y comidas contaminadas con parásitos.
Los síntomas pueden ser intermitentes o continuos e incluyen heces con olor desagradable que pueden contener mucus, pérdida de apetito y disminución de peso.
Los perros jóvenes y gatos son más proclives a tener este tipo de infestaciones. Se ha informado que cerca del 8% de los perros y el 4% de los gatos pueden contraer giardias.
La giardiasis es una zoonosis. Sin embargo, es necesario señalar que dada la baja frecuencia con que ocurriría la transmisión zoonótica de esta parasitosis, la importancia epidemiológica de la misma es mínima.
Cuando la densidad de población es más alta, estos números también pueden aumentar.
Los métodos de rutina de examinación generalmente no revelan la presencia de giardias.
Tu Médico Veterinario debe ejecutar exámenes de materia fecal a través de procedimientos para revelar este tipo de parásitos.
Una vez que el diagnóstico se establece, se dispone de un tratamiento específico.
El control medio ambiental incluye disposición rápida de heces, mantención de las unidades de la perrera tan secas como sea posible y seguir los procesos estrictos en todo momento.
Fuente Imagen: beckeranimalhospital.net