La Asociación Felina Internacional (AFI) reconoció al Fold Escocés de Pelo Largo, pero es el único organismo de registro que lo acepta, a pesar de que ha sido criado tanto en Bretaña como en Estados Unidos.
La raza tiene su origen en una gatita de orejas caídas de una camada de gatos con orejas normales nacidos en una granja de Escocia, a partir de la cual se desarrolló el Fold Escocés de Pelo Corto y proviene del mismo linaje que estos últimos con una figura parecida pero, desde luego, con pelaje largo. Es un gato de tamaño mediano, con un cuerpo robusto, bien redondeado y uniforme, que tiene una cabeza redonda de mejillas prominentes sobre el cuello corto. Las orejas, colocadas a manera de cofia dejan ver un cráneo redondo. Son comparativamente pequeñas y están dobladas hacia el frente y abajo. Se prefiere la oreja más pequeña con un doblez bien formado, a una grande de doblez suelto. Al nacer tiene las orejas erguidas y la caída no comienza a notarse hasta que los gatitos cumplen aproximadamente un mes.
Se acepta en una amplia gama de colores. El color de los ojos debe ser apropiado al color dominante del pelaje.
Cuerpo: De tamaño mediano, redondeado, sin ningún engrosamiento de las patas o la cola. Se prefiere una cola larga que se estreche hacia la punta. Garras nítidas con dedos bien redondeados.
Cabeza: Bien redondeada, de barbilla y quijadas firmes; las almohadillas de los bigotes bien redondeadas Nariz corta. Orejas pequeñas de puntas redondeadas, dobladas hacia abajo y al frente.
Ojos: Grandes, bien redondeados y separados por la nariz ancha, muy abiertos y de expresión dulce.
Pelaje: Suave, denso y afelpado, tan poblado que sobresale del cuerpo.
Colores: Cualquier pelaje y color gatuno excepto chocolate y lavanda (lila) y aquéllos de puntos más oscuros tipo Siamés.