Al pensar en el perro detective más miedoso del mundo, enseguida viene a la mente de toda una generación el “tonto” Scooby Doo, que tanto los entretenía a la hora de los dibujitos. Scooby, a pesar de su enorme porte de
Gran Danés,
no podía evitar abrazarse temblando a su dueño, el también “archimiedoso”
Shaggy ante cualquier peligro. estos divertidos personajes solamente quería escapar en cada capítulo, cuando les encargaban descubrir misterios aparentemente sobrenaturales.
En los complicados casos los acompañaban además otros tres amigos humanos: Daphne, Vilma y Fred. Y con un poco de suerte y otro poco de inteligencia, siempre descubrían a los ladrones o estafadores disfrazados de fantasmas y quedaban como valientes.
La historia de Scooby Doo creada por Fred Silverman llegó a la tele en 1969, con los productores Joseph y Hannah Barbera. Silverman cuenta que se le ocurrió el nombre del protagonista, con el famoso tema “Extraños en la noche” de Frank Sinatra. La canción en su estribillo decía algo parecido a “scooby-dooby-doo”.
Al principio
Scooby no sería la estrella y la serie estaba pensada como una comedia de animación de terror, pero temiendo asustar a los chicos, Scooby finalmente se convirtió en el principal protagonista y en los argumentos se mezcló mucho más de humor que de miedo.
Fuente: Suplemento “Mascotas” versión impresa Diario Río Negro